‘Alianza y condena’ medio siglo después

‘Alianza y condena’, el libro de poemas que Claudio Rodríguez publicó hace ahora 54 años, se ha convertido en un clásico de la literatura española. Así lo reconoció en su momento el Instituto Cervantes, que celebró su medio siglo con un acto en Madrid y con la presentación de una edición bilingüe español-inglés del libro que muchos consideran el mejor de su autor, galardonado con el Premio de la Crítica en 1966.

Rodríguez forma parte de la llamada Generación del 50 que, según el escritor Álvaro García, recuperó “un poco de corazón y de conciencia para el tiempo y el lugar, la posguerra y España”, rehumanizando la poesía. Entre los miembros más destacados de esta generación, también considerada como la de los ‘niños de la guerra’, figuran poetas como José Manuel Caballero Bonald, Antonio Gamoneda, Jaime Gil de Biedma o José Ángel Valente.

‘Alianza y condena’ fue escrito durante la estancia de Rodríguez en Inglaterra, donde recibía los consejos por carta de su amigo Vicente Aleixandre. Allí conocería a Francisco Brines, que era entonces lector en Oxford. Es un libro marcado por la añoranza de la tierra y el pasado, aún más patentes en obras posteriores. Para el crítico José Olivio Jiménez, se trata de un poemario que coloca a su autor “en la línea de los que sienten la poesía como medio de conocimiento y expresión integral de la persona completa”. A su juicio, entre sus temas centrales, está la necesidad de la verdad, su naturaleza real y los instrumentos para buscarla, poseerla y ocultarla.

 
El poeta valenciano Rafael Soler tiene a ‘Ajeno’, incluido en este libro, entre sus poemas favoritos. Como declaró en cierta ocasión, “el amor nos salva, y solo el amor es capaz de mover los muebles de sitio. Dejó escrito el extraordinario Claudio Rodríguez en su poema Ajeno : ‘Largo se hace el día a quien no ama/ y él lo sabe…’ y más adelante: ‘…A quien no ama / ¿cómo podemos conocer o cómo / perdonar?…’, y esa es la clave de todo. Y en la pareja, toca amar apasionadamente y sin fisuras, sabiendo que nadie tiembla siempre y nos acecha esa carcoma terrible del tedio”. Y recientemente, Soler nos ofreció su lectura de ‘Ajeno’ en uno de los rodajes de Poética 2.0.